jueves, 2 de octubre de 2008

Así NO!. Mire...así

Yo se que siempre puedo mejorar, que tengo muchos defectos, que muchas veces no hago las cosas bien, en fin, estamos para eso en la vida, pero...

Hace días me inscribí en un formativo de natación, al que asisto regularmente en las noches de semana, si, lo sé, me cuesta llegar a la otra orilla sin tragar agua, yo, comparado con los niños que van, parezco un ladrillo, que lucha por no hundirse en el medio de la piscina. Cuando ponen un ejercicio de mediana intensidad, lo termino, con deseos de conectarme un tanque de oxígeno y acostarme a la orilla de la piscina, hasta que el instructor diga "terminamos", bueno, por fortuna soy consciente de todas mis falencias, pero además de eso, ¿que me toque sufrir a un compañero que se compara todo el tiempo, y que no desaprovecha instante para decirme que es lo que tengo que hacer?, eso si es el colmo, honestamente, este señor está a eones de lograr un nivel para asistir a los paralímpicos, es más, creo que no calificaría para un torneo interbarrial de nadado "a lo charco", para que venga a creerse mas que el octogoldenario Phelps, y decirme a cada instante que "debo mejorar mi técnica", o que pregunte incesantemente "¿cuantos metros estás haciendo?", estos tipos son insufribles, no les basta con creerse que son mejores que el resto, sino que lo tienen que confirmar, buscando compararse permanentemente, y lo que es peor, dando instrucciones. No se si alguno de ustedes haya tenido un caso similar, lo cierto es que la vida que le toca a uno vivir, es suficiente reto como para creer que se puede andar juzgando a los demás, más cuando su palmarés no indica señales de ser un modelo a seguir.

Saber que el universo es infinito, que el potencial humano es inmenso, nos dara una visión de que un minuto que desperdicie criticando a los demás , es un minuto menos que tengo para cumplir mi propósito en la vida. Creo que nadie que haya logrado algo grande, lo hizo, criticando a los demás, quizá muy diferente sea, remar en la misma dirección, saber dar un consejo a tiempo, apoyar al que lo está necesitando, eso es verdadero altruismo, amor por el prójimo, la criticonería, más sirve para levantar resquemores, y paliar la valiosa autoestima.

1 comentario:

Juan Sarmiento dijo...

Saludos cordiales, ni qué decir que pretenda yo mejorar el post, está bien hecho.

Qué bueno encontrarlos, trato de estar en contacto con noájidas porque me agrada ver que esta tendencia crece, digo tendencia para referirme a esa búsqueda prudente del bien, de lo correcto, libre de usurpaciones y de aspiraciones judaístas como ocurre en los movimientos mesiánicos/vesiánicos.

Los felicito por el trabajo bien logrado.